VUELVEN LOS PÉTALOS DE LUZ A LA ISLA
En el mes de febrero, animados por la suavidad del invierno mediterráneo, empiezan a florecer las primeras variedades de los miles de almendros de la isla.
A punto de ser flor y no ser nada
está tu flor, almendra;
en amor, concibiendo la enramada,
la madre de la tierra.
No seas primavera: ¡no te acerques!,
¡quédate! en el alma, almendro:
sed tan sólo un propósito de verdes,
de verdes sin serlo.
(poemas de amor y guerra.
Miguel Hernández)