Antonio Escohotado
Han pasado más de 50 años desde que el joven madrileño licenciado en filosofía Antonio Escohotado viniese por primera vez a Ibiza. Lo hizo como uno más de los hippies que llegaban en la búsqueda de la utopía a la isla con novedosas ideas que cambiaron para siempre la forma darla a conocer al mundo entero y la convirtieron en un símbolo de la contracultura.
Ibiza es más que DJ, “música” electrónica machacona, ‘raves’, budas, narcos, prostitutas… Una lástima que se empeñen en dar la imagen de nuestra querida Ibiza distorsionada y repleta de clichés, esta vez, en una serie rodada fuera de la isla (aunque eso no es nuevo) y emitida en una de las plataformas con más proyección del Planeta. ¿Para cuándo una serie o una película de calidad que muestre la Ibiza real, auténtica?
Desde el Ayuntamiento de Ibiza se ha puesto en marcha, a través de su Plan Municipal sobre Drogas, una serie de exposiciones itinerantes para centros educativos de secundaria. La intención es presentar diferentes cuestiones que inviten a la reflexión y abierto a múltiples puntos de vista.
Una comedia de drogas dirigida por Carlos Theron, Lo dejo cuando quiera que ya puedes ver en Ibiza y que resume nuestra idiosincrasia de manera ejemplar. Nos cuenta cómo Pedro, Arturo, amigos desde la facultad y sobradamente preparados, y Eligio son tres profesores universitarios a los que la crisis ha dejado sin trabajo. Cansados y sin blanca, encuentran accidentalmente la solución a sus problemas en el proyecto de investigación en el que Pedro lleva años trabajando: un complejo vitamínico que ofrece, para su sorpresa, desfase a tope sin efectos secundarios. Los tres profesores, con el apoyo de Anabel, una abogada reconvertida en empleada de gasolinera, y de Jota, una alumna más interesada en la juerga que en los estudios, se lanzarán al mundo de la noche y de los negocios turbios para comercializar la mercancía. Algo para lo que no parecen estar aún tan sobradamente Preparados.
LA CARTELERA COMPLETA DE IBIZA:
Los rumores sobre el uso de drogas de los políticos españoles son constantes los últimos años. Algunas veces han sido simplemente ataques para desacreditar a un oponente pero otras veces algunas actuaciones, tics, sudores… hacen pensar en un uso de drogas ilegales por parte de algún político. Por ello, a partir de ahora se realizarán por sorpresa controles de alcohol y drogas a todas las personas que ostenten un cargo público.