SA CALETA ES AHORA MÁS PATRIMONIO DE IBIZA
El poblado de Sa Caleta supone un ejemplo único de urbanismo fenicio en el Mediterráneo. Es también el exponente más importante de los inicios de la colonización fenicia de las Pitiusas, y el origen de la ciudad de Ibiza. Un pedazo de historia que desde 1999 está considerado Patrimonio de la Humanidad. Este yacimiento es de los últimos excavados en la isla, y hasta finales de los años ochenta permaneció oculto. Sin embargo, el núcleo fue fundado a mediados del siglo VII a.C. por fenicios procedentes del extremo occidental mediterráneo; probablemente buscaban metales.
Está enclavado en una pequeña península llana conocida como sa Mola de sa Caleta, entre la playa de es Codolar y el puig des Jondal, en el municipio de Sant Josep de sa Talaia, al sur de la isla. Estuvo habitado durante cuarenta o cincuenta años y llegó a tener una población de alrededor de trescientas personas. Su trazado urbanístico ocupaba unas cuatro hectáreas, y se componía de gran número de unidades arquitectónicas que vistas en conjunto conformaban una trama.
Callejuelas estrechas con plazas pequeñas e irregulares
Es muy posible que alguna sirviera de almacén para guardar la sal, recogida en los estanques cercanos de las salinas. Según algunos estudios, sa Caleta pudo ser un punto de enlace en la larga ruta desde el famoso puerto fenicio de Tiro hasta Cádiz. Pero a principios del siglo VI a.C. sus habitantes abandonaron el poblado para trasladarse a la bahía de Ibiza, un lugar mucho más cómodo para vivir, y fundaron la que hoy es capital de la isla.
En el lado izquierdo de sa Mola de sa Caleta hay un pequeño puerto de pescadores, que probablemente crearon los mismos fenicios. Es muy agradable y siempre tiene buen ambiente.