ROSCÓN DE REYES
A partir del siglo III después de Cristo, esta tradición del dulce llega a Francia y España asimilada por el cristianismo. En el primer país el niño que encontraba el haba era colmado de regalos y mimos.
Desde entonces, se esconde el haba (que originariamente era el único objeto en su interior y daba suerte al que lo encontraba) y además una figurita de porcelana. La persona que encuentra el haba paga el roscón y el que encuentra la figurita es coronado rey o reina por un día.
Ingredientes para dos roscones:
– 500 gr harina de fuerza.
– 30 gr levadura fresca.
– 50 gr azúcar.
– 2 huevos (uno para barnizar).
– 1 cucharadita pequeña de sal.
– 75 gr de margarina.
– 130 gr de agua de azahar (conseguida de naranja hervida).
– Ralladura de limón y de naranja.
– Fruta escarchada y almendra laminada (para decorar).
elaboración:
Hacer una masa con todos los ingredientes y dejarla reposar hasta que suba, doblando el tamaño. Hacer dos roscos con la masa y pintarlos con huevo, adornarlo con las almendras y la fruta escarchada y azúcar.
Por último, se meten al horno a 180º durante unos veinte minutos, aproximadamente.