La película se basa libremente en la historia de Radio Caroline, una popular emisora pirata de los años 60.
“Radio encubierta” está escrita y dirigida por Richard Curtis, reconocido guionista de cintas como “Cuatro bodas y un funeral”, “Notting Hill”, las dos entregas de Bridget Jones, o la serie (y las películas) de Mr. Bean. Esta es su segunda incursión en la dirección tras la comedia romántica “Love actually”, de 2003.
Al igual que en su ópera prima, Curtis ha logrado reunir un espectacular reparto en el que destacan Philip Seymour Hoffman (“Truman Capote”, “Antes de que el diablo sepa que has muerto”, “La duda”) Bill Nighy (“Valkiria”, “Underworld”, o el Davy Jones de la trilogía de “Piratas del Caribe”), Rhys Ifans (“Notting Hill”, “La niñera mágica y el Big Bang”, “Elizabeth, la edad de oro”), Nick Frost (“Arma fatal”, “Zombies Party”, “Pisando fuerte”) Kenneth Branagh (“Valkiria”, “Frankenstein, de Mary Shelley”, “Mucho ruido y pocas nueces”) o Gemma Arterton (“RocknRolla”, “Quantum of Solace”). También aparecen en la cinta dos actores conocidos por sus intervenciones en la genial comedia televisiva “Los informáticos/The IT Crowd”: Chris O’Dowd y Katherine Parkinson.
El rodaje empezó el 3 de marzo de 2008 y duró un total de 14 semanas, de las cuales, cinco transcurrieron en Portland Harbour, condado de Dorset, en un barco llamado Timor Challenge. En el barco embarcaban cada día un total de 140 personas, entre maquilladores, catering, vestuario, actores, equipo de cámara, decoradores, eléctricos, carpinteros, etc.

El equipo tardaba cada día unos 45 minutos en salir a alta mar e incluso algo más en regresar. Los días de trabajo eran muy largos y extenuantes, pero aun así varios miembros del equipo aprovechaban para pescar en los descansos. La corriente y el viento movían el barco y tenían que usar varios remolcadores para mantener el Timor Challenge en la misma posición, para que no se viera la tierra.

Para preparar a los actores para la vida en Radio Rock, Richard Curtis les mandó de “campamento” al Timor Challenge. Ensayaban durante el día. Al atardecer jugaban a los dardos, al futbolín, cenaban y bebían antes de retirarse a unos camarotes diminutos. “Esos días nos unieron mucho”, dice el actor Rhys Ifans.
Los actores también tuvieron que hacer un cursillo acelerado con Emma Freud y el DJ John Revell en un estudio profesional de Londres para aprender a pinchar. También se reunieron con el ex pinchadiscos pirata Johnny Walter y con el pincha Chris Evans para cotejar diferentes estilos. Al final del cursillo los actores grabaron un programa de una hora que se usaría posteriormente en la película. Además, el director les dio iPods con una selección de temas escogidos por él para que se familiarizaran con el estilo de la época. El único que no pudo recibir esta “formación” fue Philip Seymour Hoffman, que por problemas de agenda se incorporó un poco más tarde al rodaje. Sin embargo, no tuvo problema alguno con su caracterización como el Conde, un personaje basado en el Emperador Rosko, un pincha americano muy famoso en la época.

La película contiene 54 temas que incluyen The Rolling Stones (“Jumping Jack Flash” y “Let’s Spend the Night Together”); The Kinks (“All Day and All of the Night”); The Who (“My Generation”, “I Can See for Miles” y “Won’t Get Fooled Again”); Small Faces (“Lazy Sunday Afternoon”); Jimi Hendrix (“The Wind Cries Mary”); Leonard Cohen (“So Long, Marianne”); The Supremes (“The Happening”); Otis Redding (“These Arms of Mine”); The Hollies (“I’m Alive”); Smokey Robinson and The Miracles (“Ooo Baby Baby”); Sandie Shaw (“Girl Don’t Come”), y muchos otros.