Las costas Pitiusas son la base de la economía y su protección contribuye a mantener nuestro futuro turístico. A principios del mes de octubre y durante dos días tuvo lugar en Santa Eulària el Primer Congreso del Mediterráneo de Gestión del Litoral, organizado por los Consells de Ibiza y el de Formentera, así como todos los Ayuntamientos de las dos islas.
Cabe destacar la calidad de las ponencias, la coordinación entre los ponentes y sobre todo las diferentes perspectivas con las que se abordó el tema de la gestión de nuestro litoral, tanto las zonas emergidas como las sumergidas.
Se abordaron los temas científicos de forma comprensible y realista: la gestión de las playas, la conservación de las dunas y especies que viven en ellas, la proliferación de medusas, el mundo submarino,… poniendo de manifiesto los problemas esenciales y, lo más interesante, qué es lo que estamos haciendo mal.
Fue grato ver representadas, aunque fuera más por motivos políticos que por interés personal, a todas las instituciones de las dos islas. Y me asombró gratamente que al final del congreso se hiciera la presentación pública de un documento firmado por todas las instituciones, donde se comprometían a realizar una serie de mejoras para contribuir así a la protección del litoral.
Parece que este documento no ha caído en el olvido, al ver las últimas noticias aparecidas el periódicos locales: “Empiezan los proyectos de protección dunar en la Sal Rossa” (22/10/08); “Presentan un proyecto para regenerar la Poseidonia a partir de semillas” (23/10/08).
Esperemos que sea el comienzo de una mejora en la gestión integrada de la base de nuestra economía y, como no, de nuestro patrimonio natural.
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