Según un estudio encargado por la Dirección General del Cultura del Govern de les Illes Balears para determinar el consumo efectivo y el consumo potencial de productos y servicios culturales por parte de la ciudadanía de las Islas Baleares, en Ibiza y Formentera, se dedica más tiempo a mirar la televisión, practicar algún deporte, a descansar y a dormir. En menor medida, a pasear.

En las Pitiusas, se va a tres conciertos al año, frente a los 2,4 en las Baleares. Entre las barreras para un mayor consumo cultural destaca la oferta limitada o de poca calidad (en el caso de museos, exposiciones, monumentos, conciertos, teatro y danza y el precio excesivo en el caso del cine.

El 25 % de la población mayor de 16 años se puede considerar consumidor habitual de cultura, ya que participa diferentes veces al año en una o diversas disciplinas culturales. Otro 25 % son consumidores ocasionales: realiza pocas veces al año un consumo cultural. El 50 % de la población de las Islas Baleares no realiza ningún tipo de consumo cultural a lo largo del año (excluyendo el cine) o como máximo lo hace una sola vez

En su conjunto, la realización de actividades relacionadas con la cultura como: leer; ir al cine; ir a conciertos, a exposiciones o al teatro; hacer fotografías, música o pintura; escuchar música, bailar o cantar, forma parte de las actividades habituales que realiza la ciudadanía de las islas durante su tiempo libre.

El consumo o la realización de actividades culturales es mayor entre las mujeres en prácticamente todos los ámbitos. Además, la participación es mayor a medida que la gente se hace mayor. Las actividades culturales más realizadas durante los últimos 12 meses han sido ir a la biblioteca, leer, ir al cine e ir a conciertos. Por el contrario, las menos realizadas han sido: ir al circo, espectáculos de danza o acudir al teatro.

El nivel de consumo balear dista del nivel de los países más avanzados. Las causas son la falta de tiempo o la falta de interés. Las actividades preferidas son: pasear; practicar algún deporte; ir de excursión, a la playa o de viaje; encuentros con familiares y/o amistades y mirar la televisión.

Las dos tipologías de actividades culturales que más interés despiertan son: escuchar música y leer libros o diarios. Las dos que menos: realizar actividades artísticas e ir a las bibliotecas. Las tres formas más habituales para informarse de los eventos culturales son: navegar por internet (Redes sociales); por recomendaciones de amigos o familiares y por anuncios en prensa escrita.

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