ANCLAJES ECOLÓGICOS EN SES FIGUERETES Y TALAMANCA
El objetivo de este proyecto es, por un lado regular los anclajes incontrolados que se producen durante toda la temporada turística y la progresiva degradación de las praderas de posidonia y, por otra parte, aprovechar para contribuir a desestacionalizar la demanda náutica.
80 en la playa de Ses Figueretes, para embarcaciones con esloras de 12, 15 y 30 metros
55 en la playa de Talamanca, para embarcaciones con esloras de 5, 6, 7 y 8 metros
Las ventajas de este sistema son muchos, entre ellos evitar la ocupación de más parcelas del medio marino con instalaciones fijas, evitar el arrastre de cadenas y cabos por el fondo marino, ordenar el tráfico en temporada alta y simplificar el uso para los usuarios, así como para las instituciones que deben hacer el control, ayudar a estos usuarios a orientarse y, sobre todo, lo más importante, respetar el entorno natural y proteger la pradera de posidonia.
Actualmente en estas playas existe una gran tradición de dejar embarcaciones sin ningún tipo de control ambiental y esta situación está empezando a ser insostenible. Por eso la petición de este informe que avale la instalación de los anclajes ecológicos.
El Ayuntamiento calcula que la instalación y mantenimiento de los anclajes ecológicos para un periodo de 8 años supondrá una inversión de unos tres millones de euros. La iniciativa pero deberá generar beneficios para la empresa adjudicataria a través del cobro de cuotas, que serán de dos tipos: anuales o de verano (en este apartado también se establecerá una temporada alta, media y baja).
El proyecto ya ha sido enviado a la demarcación de Costas para obtener los permisos. La alcaldesa confió en que este verano pueda ponerse en marcha la instalación de los nuevos anclajes.
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